Construir tu propio ordenador puede parecer un proyecto desalentador, sobre todo para un principiante, puede que pienses que es demasiado complejo, caro o requiere mucho tiempo, ¡pero no tiene por qué ser así!

En esta guía te explicamos cómo montar un PC paso a paso, te explicamos las distintas piezas que necesitas y te guiamos en el proceso de montaje.

Lee esta guía para obtener instrucciones fáciles de seguir.

¿Qué quieres construir?

El primer paso en este proceso es definir la finalidad del ordenador.

Puedes ser un jugador dedicado que busca un ordenador gaming personalizado, un estudiante que realiza tareas de investigación o edición, o alguien que utiliza el ordenador para cuestiones simples y cotidianas. Tienes que tener en cuenta para qué quieres tu ordenador, ya que eso va a definir el tipo de componentes que necesitarás montar en tu ordenador. Y así evitarás gastos de dinero en cosas que no vas a necesitar.

Recuerda que en esta guía sólo hablamos de la torre en sí, no de configuraciones completas que incluyen monitor, ratón, teclado, etc…

¿Cuánto puedes gastar?

El costo de las piezas de tu ordenador puede variar mucho, por lo que es una buena idea tener un presupuesto realista en mente desde el principio.

Si buscas el mejor rendimiento en todos los componentes de tu ordenador, gastarás más. Los procesadores rápidos y los componentes de última generación con mayor capacidad son más caros. Además, como estos equipos electrónicos generan más calor, es necesario invertir en sistemas de refrigeración adecuados para acompañar la potencia de las piezas.

En el caso de la memoria y el almacenamiento, estos representan una parte del costo de un nuevo ordenador, y construir tu propio ordenador te da la flexibilidad de ahorrar en estos componentes si lo prefieres. Aunque los costos de la RAM y los SSD aumentan con la capacidad que ofrecen, pueden ser menos costosos que comprar componentes preinstalados que a menudo son inadecuados y necesitan ser actualizados rápidamente.

Cuando aconsejamos la construcción de un ordenador a medida, en lugar de una máquina ya montada —como en el caso de los ordenadores King Mod Systems—, dividimos los presupuestos en 4 grandes grupos de precio:

  • 200~500€: la mayoría de los equipos de oficina o máquinas recreativas con procesadores con gráficos integrados (serie AMD 8000G, por ejemplo) se encuentran en este rango de precios; no se puede esperar una gran cantidad de memoria o almacenamiento, o componentes de las llamadas marcas AAA;
  • 500~1000€: este rango ya incluye máquinas de trabajo un poco más potentes, con la inclusión de procesadores como un Core i7 o Ryzen 7, más memoria RAM o almacenamiento superior a 1TB de SSD, y en el caso de las máquinas para gamers, ya comenzamos a encontrar algunas opciones con gráficas dedicadas, como las RTX 3050, RTX 4060 o RX 7600;
  • 1000~1600€: probablemente este es el grupo de precios más común entre los gamers, especialmente para aquellos que buscan jugar entre 1080p y 1440p en configuraciones de calidad media-alta; también encontramos configuraciones más versátiles para edición de imagen y/o streaming;
  • Por encima de 1600€: este rango está reservado para los mayores entusiastas. Aquí encontramos configuraciones con procesadores y gráficas de gama alta, así como el uso de marcas más reconocidas e incluso configuraciones con refrigeración líquida, mediante elaborados sistemas de watercooling.

¿Qué piezas de hardware necesitarás?

Hay 5 partes fundamentales para construir un ordenador:

  1. Procesador (CPU)
  2. Placa base (Motherboard)
  3. Memoria (RAM)
  4. Almacenamiento (SSD)
  5. Caja, refrigeración y fuente de alimentación

Otros componentes, como el sistema operativo (OS), monitor, ratón, fuente de alimentación y teclado, tendrán menos impacto en el rendimiento, pero no te olvides de incluirlos en tu presupuesto total si estás buscando un sistema completo.

1. Procesador

La CPU es el motor de tu ordenador y define las expectativas de rendimiento de todo el montaje, por lo que generalmente es el primer componente que deberías elegir. La CPU proporciona la potencia de procesamiento y las instrucciones detrás de todas las operaciones de tu equipo, y solo podrás elegir entre dos marcas: AMD e Intel.

Ambas marcas ofrecen soluciones para todo tipo de usuarios y, en algunas ocasiones, la elección se basa en preferencias personales o en el presupuesto total. A día de hoy, AMD está más asociada a máquinas que ofrecen buen rendimiento tanto en juegos como en trabajo, mientras que Intel se asocia más con los gamers. En términos de precio, AMD tiende a ser ligeramente más barata que Intel.

Al elegir una CPU, es importante tener en cuenta los gigahercios (GHz), ya que más GHz indican un procesador más rápido. Sin embargo, esto también implica un mayor consumo de energía y más generación de calor, lo que requiere un mejor flujo de aire y disipación de calor. Esto puede significar la necesidad de un sistema de refrigeración adicional y elegir una caja con buena ventilación, como aquellas con frontales de malla o más ventiladores preinstalados.

2. Placa base

La placa base es el componente que conecta todo: el hardware, la fuente de alimentación, la tarjeta gráfica, el procesador, etc. También determina qué otras piezas de hardware puede utilizar el ordenador. En otras palabras, no todos los componentes son compatibles con todas las placas base.

Por ejemplo, la placa base establece la potencia del procesador que tu PC puede soportar, la tecnología de memoria (DDR5, DDR4, DDR3, etc.), el formato de almacenamiento (2,5 pulgadas, mSATA o M.2) y la interfaz de almacenamiento (SATA o PCIe).

La placa base puede elegirse según su tamaño, como Mini-ITX, Micro-ATX, ATX y E-ATX. Las placas base más grandes tienen más conexiones, mientras que las más pequeñas permiten sistemas más compactos. Por ejemplo, una placa Mini-ITX puede usarse para montar un sistema pequeño, como un servidor de almacenamiento.

3. Memoria (RAM)

Añadir memoria (RAM) es una de las formas más rápidas y asequibles de mejorar el rendimiento de un ordenador.

La RAM le proporciona a tu sistema más espacio disponible para almacenar temporalmente los datos que se están utilizando, ayudando a realizar más tareas simultáneas, como tener varios programas abiertos o navegar por la web sin largos tiempos de carga.

Elegir la mejor memoria RAM para tu sistema implica dos cosas: compatibilidad y la cantidad de memoria que tu sistema puede soportar. Primero, identifica el tipo de módulo que utiliza tu sistema según el formato (la forma física del módulo —generalmente, los ordenadores de sobremesa usan DIMMs, mientras que los portátiles usan SODIMMs—), y después averigua la tecnología de memoria (DDR5, DDR4, DDR3, etc.) que soporta tu sistema.

Luego, tu sistema solo puede soportar una cierta cantidad de memoria. Si compras 64GB de RAM y tu ordenador solo puede soportar 16GB, tendrás 48GB desperdiciados. Y no todos necesitan la misma cantidad de RAM, así que piensa de manera realista sobre cuánta RAM necesitas según el uso que le das a tu ordenador. Revisar los programas o juegos que más utilizas para saber la cantidad de memoria RAM necesaria para que funcionen de forma optimizada puede ser una buena manera de calcular cuánta memoria necesitas.

4. Almacenamiento (SSD)

Tus archivos y datos se guardan en un disco de almacenamiento, ya sea un disco duro (HDD) o una unidad de estado sólido (SSD). Aunque los HDDs tradicionalmente ofrecen más almacenamiento por un precio más bajo, los SSDs los han dejado prácticamente obsoletos, siendo, de media, 6 veces más rápidos y 90 veces más eficientes en términos de energía que los HDDs.

La cantidad de espacio que necesitarás depende de tu actividad. Por ejemplo, si planeas usar el ordenador para artes gráficas, necesitarás una buena cantidad de almacenamiento — discos de más de 2TB son lo ideal — así como unidades más rápidas y fiables para prevenir la pérdida de datos y mejorar los tiempos de acceso a los archivos.

5. Caja, refrigeración y fuente de alimentación

El tipo de PC que estás construyendo también influye en el tipo de caja, ventiladores, sistema de refrigeración y fuente de alimentación que necesitarás. Si estás creando una máquina de alto rendimiento, por ejemplo, necesitarás una fuente de alimentación robusta y fiable para que funcione correctamente. Imagina, por ejemplo, tu casa y los electrodomésticos que tienes: un cuadro eléctrico de baja potencia no permitirá encender demasiados equipos al mismo tiempo. Por eso, tendrás que elegir una fuente de alimentación con más capacidad si optas por componentes más potentes, o si eliges un cuadro eléctrico con solo un disyuntor, una sobrecarga podría hacer que saltara más veces o incluso quemarlo por exceso de carga. En el caso de las fuentes de alimentación, elegir marcas más fiables y con certificaciones de potencia 80Plus garantiza un uso continuo sin fallos y con mayor eficiencia.

También necesitarás una caja con un flujo de aire interno optimizado y ventiladores para expulsar el aire caliente que podría dañar el sistema, e incluso reducir la vida útil del ordenador. La elección de la caja suele ser una decisión personal, ya que es el componente principal que se ve en el escritorio.

Además de los ventiladores de la caja, un buen sistema de refrigeración puede ser extremadamente importante para el correcto funcionamiento de procesadores más potentes. Muchos de los procesadores que vendemos ya incluyen un sistema de refrigeración, pero asegúrate de esa información en las descripciones de nuestros productos cuando estés eligiendo el procesador. Si necesitas mejor rendimiento, más silencio o incluso algo más atractivo, hay cientos de opciones que puedes consultar en nuestra web.

Consejo: usar bridas (zip ties) es una gran ayuda para gestionar todos los cables dentro de tu ordenador, y consolidar los cables también mejora el flujo de aire. En general, las placas base las incluyen como accesorios, pero puedes usar cualquier tipo de bridas.

¡Ya tienes las piezas, ahora vamos a montar todo!

El montaje es donde empieza la parte emocionante. Nuestra lista de tareas incluye:

  1. Antes de empezar
  2. Añadir el hardware principal (CPU/Placa base/Tarjeta gráfica)
  3. Instalar la memoria
  4. Instalar el almacenamiento (HDD o SSD)
  5. Instalar la tarjeta gráfica
  6. Probar el sistema

1. Antes de comenzar

Prepara una área de trabajo amplia para mantener el montaje organizado, ¡puede ser frustrante no encontrar lo que buscas!

Usa una pulsera antiestática (ESD) para evitar la electricidad estática, y trabaja en suelos sin alfombras, si es posible. La electricidad estática es una de las pocas maneras en las que el hardware puede dañarse.

Ten a mano una lata de aire comprimido para eliminar cualquier polvo o restos finos de las superficies de los componentes, especialmente mientras instalas el procesador, la memoria y el SSD.

2. Añadir el hardware principal

El primer paso es instalar el procesador y la fuente de alimentación. Comienza por desempaquetar la placa base de la bolsa antiestática e instalar el procesador en el socket; todas las placas base incluyen una guía de primeros pasos que explica cómo instalar el procesador. Es un procedimiento extremadamente importante y debe realizarse con mucho cuidado. Romper o doblar los pines de la placa base o del procesador puede significar la pérdida de la garantía, y son una de las piezas más caras de tu PC.

A continuación, instala la fuente de alimentación en la caja. Esto hará que el paso y la organización de los cables en la caja sea más sencilla. En esta fase, pasa los cables de alimentación a través de los orificios de la caja donde conectarás la energía a la placa base y la tarjeta gráfica.

Cuando hayas completado ese paso, instala la placa base en la caja, asegurándote de haber instalado primero la chapita trasera de la placa base (un accesorio que las placas traen y que crea una barrera contra el polvo en la parte posterior de la caja; es un error de principiante muy común olvidarse de montarlo antes de instalar la placa base) y los tornillos separadores.

La instalación de las piezas no es complicada, pero puede haber margen para errores. Te recomendamos que consultes el manual de cada componente para obtener instrucciones precisas.

3. Instalar la memoria

La RAM es el hardware más sencillo de instalar al montar un PC. Localiza los slots de memoria en la placa base. Sujeta los módulos de memoria por los lados para evitar tocar los chips y los pines dorados. Alinea las ranuras del módulo con la muesca del slot y presiona firmemente hasta que escuches un clic.

4. Instalar el SSD

La instalación dependerá del formato del SSD que hayas comprado (2,5 pulgadas, mSATA o M.2). Para instrucciones detalladas, consulta el manual del propietario.

De manera resumida, si es un disco de 2,5″, habrá un lugar en la caja donde deberás fijarlo y luego conectar dos cables: uno de alimentación y otro de datos, que será conectado a la placa base. En el caso de mSATA o M.2, deberás conectar el disco directamente en un slot equivalente en la placa base, sin necesidad de cables. Ten en cuenta que algunos discos M.2 se calientan bastante, por lo que las placas base suelen incluir un disipador, pero también puedes adquirir uno por separado.

5. Instalar la tarjeta gráfica

Si has elegido un sistema potente que utiliza una tarjeta gráfica dedicada, este es el momento de instalarla en la placa base.

Las nuevas tarjetas gráficas son cada vez más potentes y grandes.

Dejar la instalación de la gráfica para el final puede ser una buena idea para garantizar la mejor disposición de los cables y el mejor flujo de aire posible en el interior de la caja.

Generalmente, instalar una gráfica implica conectarla directamente en el slot PCI-e de la placa base y luego conectar un cable de alimentación. Consulta el manual de la tarjeta gráfica para saber qué cable de alimentación necesitas conectar.

6. Probar el sistema

Una vez montado el sistema, llega el gran momento: ¡pulsar el botón de encendido!

Asegúrate de que el monitor y el teclado están conectados, y si todo funciona correctamente, aparecerá una pantalla donde podrás acceder a la BIOS del sistema. En este punto, puedes configurar la memoria, el rendimiento e incluso el orden de arranque (si tienes varios discos instalados en el ordenador). Una vez configurado, no necesitarás volver aquí.

Si tienes un disco o pendrive con un sistema operativo, colócalo en la unidad correspondiente, arranca el sistema e instala el OS.

¡Enhorabuena, acabas de montar tu propio PC!

¿Sigues teniendo dificultades?

En este artículo explicamos todo sobre cómo montar un ordenador, pero aún así, sabemos que puede ser una tarea un poco complicada, especialmente para principiantes. Si este es tu caso, tenemos dos soluciones para ti.

Si montar un ordenador no es lo tuyo, tenemos ordenadores King Mod Systems ya montados y disponibles para la venta. Simplemente puedes pedirlo en nuestra web.

La otra opción es que nos compartas cuál es tu presupuesto máximo y el uso que le vas a dar al ordenador. Puedes hacerlo por e-mail a [email protected]. Te ayudamos a elegir las piezas y montamos la máquina perfecta para ti. Disponemos de equipos técnicos especializados en todas las tiendas que pueden hacer un montaje profesional y cuidadoso. El costo de este servicio lo puedes consultar aquí.

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